Armageddon
En primer lugar, lo científicamente correcto es hacer públicos los hechos. Confío en que, a la luz de los acontecimientos transcurridos a lo largo de este viernes, vuestras conclusiones coincidirán con las mías. En el peor de los casos, al menos conoceréis los indicios que me han ayudado a deducir que el fin del mundo ha llegado:
1º: Me levanto y, aprovechando el gripazo, me da por ver un episodio de "Doctor en Alaska" en el ordenador. Casualmente doy con el divertido capítulo en el que un satélite cae sobre las montañas de Cicely, impactando desafortunadamente contra el quinto novio de O'Conell, la protagonista (y convirtiéndolo automáticamente en su quinto novio muerto). Me echo unas risas y unas buenas meditaciones trascendentales. Es lo que pega después de un episodio de "Doctor en Alaska".
2º: A media mañana, mi vecino loco vuelve a hacer de las suyas. Grita como un condenado y le oigo arrojar algún objeto contundente. A través de mi ventana veo algunas tejas rotas en el tejado de otro vecino, y hay un tiesto destrozado en el suelo de un patio contiguo. Subo arriba para avisar a Roger de que no se asome a la ventana, porque el loco está practicando el lanzamiento de ladrillo. Me lo encuentro asomado. En ese mismo instante, un trozo de cemento del tamaño de un puño le pasa por al lado de la cabeza. Roger se aparta a tiempo, pero el techo de uralita de mi patio trasero no tiene tan buenos reflejos. Se produce un Deep Impact en pleno tendedero. El meteoro del loco atraviesa el techo y agrede brutalmente a las sandalias de Roger que estaban encima de un armario.
Pues nada, se pone un parche en el techo y a otra cosa. No nos enfadamos con el loco porque es un pobre enfermo, sin culpa de nada, y nosotros somos muy comprensivos. Aunque no estaría mal que lo atropellara un coche.
3º: Anuncian en el telediario el inminente acercamiento a la Tierra de un meteorito, que podría llegar a chocar contra nosotros en el 2036. Tras el susto de los titulares, el locutor reconoce que la probabilidad de que el pedrusco alcance la superficie terrestre no es demasiado alta: una entre cincuenta mil. Me pregunto qué probabilidad habría de que un meteorito procedente de la casa de mi vecino alcanzara mi tendedero.
Tres hechos aislados y diferentes confluyen inexorablemente en el mismo mensaje: ¡meteoritos! Y los tres han ocurrido durante la misma mañana, en apenas 3 horas. ¿No os parecen indicios suficientes de que algo extraño está ocurriendo? ¿No interpretáis un claro mensaje, llegado de ultratumba? Está bien, veo que sois escépticos. Pero aún existen otras dos pruebas que corroboran mi teoría de que se ha producido una perturbación en la fuerza. Me las estaba reservando para el juicio (el juicio final, se entiende), pero ahí van:
4º: Vamos a cenar a un restaurante mejicano. Antes de darme cuenta, el camarero ha metido mi cabeza en una palangana de metal, y golpea furiosamente la chapa con un vaso para hacer que mi cráneo retumbe. Al parecer, es una forma de amenizar la velada. Por fin comprendo el sufrimiento del gato Tom (de Tom y Jerry), y admiro su paciencia. Esto no tiene mucho que ver con el fin del mundo, pero está claro que pertenece al campo de lo paranormal.
5º: Al regresar a casa, mis padres están terminando de ver "Mothman, la última profecía" y... ¡ninguno de los dos se ha quedado dormido! Esta circunstancia insólita constituye, en si misma, un hecho sobrenatural (cualquiera que haya visto "Mothman, la última profecía" sabe a que me refiero).
Algo está ocurriendo, de eso no hay duda. Podéis escucharme y ajustar las cuentas con Dios, o mantener vuestra mente cerrada y enfrentaros al apocalipsis sin los deberes terminados.
P.D. ¿De donde habrá sacado el loco los trozos de ladrillo que arrojaba por la ventana? Estos últimos días le oíamos golpear la pared que su casa comparte con la nuestra. Quizá esté derribando el muro lentamente. Uno de estos días, en mitad de la noche, puede que termine el agujero, y que introduzca el brazo para estrangular al pobre Roger, mientras duerme plácidamente en su cama. Jo, qué susto se va a llevar, ¡y cómo nos vamos a reír!...
(Porcentaje de realidad: 95%)
6 comentarios:
Y sabiendo que el fin del mundo mundial se acerca ¿Qué vas a hacer en tus últimos días? Yo de tí, haría caligrafía --> Ventrilocuo dijo: "Está bien, veo que soys escépticos."
Lo siento, estoy mamoncilla este fin de semana.
Por cierto, no se si llego a entender totalmente lo del mexicano...será verdad o mi mente perversa lee lo que quiere leer?
Oops! Esto... es que lo había escrito mi perro... Bueno, muchas gracias, ya está corregido. Aunque ese fallo es de ortografía, no de caligrafía... ;P (perdón, perdón, soy vengativo por naturaleza). En cuanto a lo del Mejicano, ¿qué interpreta tu perversa mente?
El loco ese, está encerrado en una casa o vives al lado de un manicomio, qué es ???
jajaj claro que sí, vosotros como Gila, cuando contaba aquella historia de un tipo al que se cargan haciendole una broma y su padre decía "Me he quedao sin hijo, pero me he reído...!"
(hoy sí, lo he acertado, el 5% de irrealidad es lo de Mothamn, ¿verdad?)
Fé de ratas
"Mothman"
Ha sido un error inconsciente, no un acto de solidaridad ortográfica con el autor del blog
waiting for godot: vive en el adosado contiguo. En principio solo es una vivienda, aunque a veces pienso que mi pueblo entero es un manicomio.
pola: espero que mi padre no pierda ningún hijo, pero sí, es algo así... (qué malos soIs, vais a hacer que esa falta de ortografía me torture el resto de mi vida).
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