martes, 19 de diciembre de 2006

Put your head on my shoulder

Cuando vemos una película en casa de Lulú, ella siempre busca una manta pesada, pone los pies sobre el sofá, apoya en mí su cabecita y se queda dormida antes de la primera frase. Ella asegura que le encanta que veamos películas, pero lo cierto es que el único que las ve soy yo. Nunca me quejo, porque me parece la forma más agradable de ver cine que conozco.

Hoy la película era aburrida y me puse a pensar en mis cosas. De pronto, se me ocurrió una pregunta que necesitaba respuesta inmediata, así que moví un poco el brazo para despertar a la soñadora.

-Lulú -le dije-, ¿tú me quieres solo porque soy una buena almohada?

Ella abrió unos milímetros los párpados, me dedicó una sonrisa casi imperceptible y dijo en un susurro:

-Estás loco...

No voy a desmentir su observación... Pero juro que, justo antes de volver a dormirse -cuando parecía que me abrazaba-, ella me ahuecó. ¡Estoy seguro de que me ahuecó!

(Porcentaje de realidad: 80%)

2 comentarios:

Anónimo dijo...

JEJEJEJE!Estarás loco, pero piensa en que tienes la "virtud" de que te ahuecan porque eres "cómodo".
Esos son los mejores abrazos. un buen post. me encanta tu blog!:D

Anónimo dijo...

Deberías probarlo, es la mejor forma de ver una pelicula :)